jueves, 21 de mayo de 2009

capitan gribius


Juntando a su lado un grupo elite Kaleesh igualmente sedientos de sangre que él, los Izvoshra, Grievous se convirtió en un cruel señor de la guerra y se las arregló para sacar a la fuerza a los Huk de Kalee. Pero su amargura no terminó con ese triunfo y los empujó más lejos, asaltando sus mundos de colonias. Sus despiadados ataques y destrucción masiva de los planetas enteros Huk aseguraron la victoria a Kaleesh —hasta que los Huks inesperadamente voltearon hacia la República por ayuda. Caballeros Jedi, fueron enviados para detener la guerra, aliados con los Huks y las multas y embargos se fueron hacia los Kaleesh. Kalee terminó en la pobreza, y cientos de miles de Kaleesh murieron de hambre.

Los records de guerra de Grievous llamaron la atención de San Hill, el presidente del Clan Bancario Intergaláctico. Sus contactos en el creciente movimiento separatista del Conde Dooku habían provocado un profundo cambio y Hill empezó a buscar influencia y ventaja en la inevitable guerra civil que se estaba preparando. Vio en Grievous un valioso recurso. A cambio de respaldar las deudas de Kalee provocadas por la guerra contra los huks, el Clan Bancario consiguió los servicios eternos de Grievous como intimidador y como guerrero.

La llegada de San Hill, trajo consigo una oportunidad para Grievous. Hill vio el potencial de Grievous como un "agente de colecciones" para el CBIG (Clan Bancario Intergaláctico) y a cambio por sus servicios, le ofreció solventar la gran deuda de Kalee, así ayudando a su gente a superar los efectos del embargo. Grievous sintió disgusto por la noción de ser un quiebra piernas glorificado para una mega corporación sin alma, pero entendía lo que el acuerdo significaría para su gente, y además, había algo en ese guerrero nato que necesitaba seguir peleando—si no con los Huk, entonces con alguien más, en alguna parte. Finalmente aceptó, tomando el comando del ejercito privado de las fuerzas droide del Clan.

El CBIG mantuvo su promesa, aliviando el déficit de Kalee y resucitando su comercio. A cambio, Grievous se convirtió en un elemento extremadamente eficaz. Fue con sus esfuerzos que el CBIG colectó agresivamente créditos atrasados de Ord Mantell, y tomó Sistemas diseñados por los Phlut. Pero no encontró las comodidades de su antigua vida; quería su vieja élite, los Izvoshra, pero aparte de él mismo, el Clan Bancario no contrataría a los Kaleesh. Se tuvo que conformar con droides, pero, al no tener confidencia con los droides de batalla básicos del CBIG, exigió modelos más inteligentes para tomar el lugar de su elite. Con el permiso de Dooku, Hill aceptó y comenzó la producción del MagnaGuardias IG-100. Grievous, al principio, estaba a disgusto con los droides debido a que eran completamente impensables. Pronto pidió que fueran reprogramados para cuidarlo en combate y aprendieran como pelear como sus viejos camaradas de su equipo elite mata Huk-varios años antes.

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